En la mitología griega era hija de Agamenón y Clitemnestra
(hija de Zeus y Leda y hermana de Helena).
Su padre marcha a la guerra de Troya y pasado mucho tiempo
vuelve victorioso a su patria, donde su mujer y el amante de esta le dan
muerte.
El hijo de ambos se ve obligado a exiliarse siendo aún un
niño y cuando crece su hija
Clitemnestra, es entregada a un hombre humilde como esposa porque Egisto
cree que así no podrá tener hijos poderosos que puedan vengar la muerte de su
abuelo y recuperar el trono.
Un día Electra ve un hombre por el campo, era Orestes, su
hermano, que se hizo pasar por un mensajero que venía a darle noticias de
Orestes. Pero cuando este y su compañero se hospedan en casa de Electra, viene un viejo, le reconoce
y revela su verdadera identidad.
El anciano le dice donde se encuentra Egisto y planean la
muerte de la madre. Electra envía al viejo a que diga a su madre que ha dado a luz y hacerla
venir para que haga las ofrendas necesarias.
Orestes mata a Egisto mientras el traidor estaba haciendo
sacrificios a las ninfas y vuelve a la casa de su hermana. Allí ella le dice
que su madre esta al llegar. Entonces a Orestes se le presenta el dilema
de matar a su madre o no, pero tras
meditarlo se apiada de ella, sin embargo Electra insiste en que lo ha de hacer
y finalmente le convence para que la asesine.
Después de la muerte de Clitemnestra, se le aparecen los
Dioscuros, hermanos de esta. Castor le dice lo que Zeus y las Moiras le han
designado: ha de entregar a su hermana a Pílades, su compañero, en matrimonio y
ha de huir de las Erinias y dirigirse hacia Atenas, donde Palas las ahuyentará
y después será juzgado. Únicamente después del juicio podrá hacer una vida
feliz.
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